El transporte por carretera es la forma más importante de transporte de mercancías, ya que utiliza vehículos pesados que circulan por la red de carreteras. Es el más accesible y flexible en comparación con otras formas de transporte. Permite organizar eficazmente el transporte en distancias cortas, medias y largas, garantizando las entregas directamente del expedidor al destinatario. Es la base de la logística nacional e internacional.
El transporte isotérmico se realiza utilizando vehículos aislados térmicamente sin refrigeración activa. Es adecuado para transportar mercancías que requieren protección contra las fluctuaciones de temperatura, como alimentos o productos farmacéuticos en distancias cortas. La isoterma garantiza el mantenimiento de las condiciones térmicas y protege la carga de influencias externas.
El transporte internacional implica el movimiento de mercancías entre distintos países, lo que exige conocer la normativa aduanera, el derecho del transporte y las normas internacionales. Es un elemento clave del comercio exterior y del funcionamiento de las cadenas mundiales de suministro. Abarca tanto la exportación como la importación y el tránsito. Sirve tanto para el transporte a mercados de la Unión Europea como para el transporte a países de fuera de la UE.
El transporte frigorífico consiste en transportar mercancías que requieren el mantenimiento de una temperatura específica. Se realiza mediante remolques frigoríficos que permiten transportar alimentos, medicamentos o artículos sensibles al calor o al frío. El mantenimiento de una temperatura constante garantiza la frescura y calidad de los productos transportados, mientras que la supervisión de los sistemas de refrigeración asegura un control total del transporte.