El leasing es una forma popular de financiación utilizada por muchos empresarios del sector del transporte. En virtud de este acuerdo, el arrendador cede al arrendatario el derecho a utilizar determinados equipos, como camiones, a cambio de pagos periódicos. Para muchas empresas, se trata de una solución ventajosa, pero hay situaciones en las que la cooperación con un arrendador puede causar problemas, especialmente en tiempos difíciles como la actual crisis económica.
El sector del transporte se ha enfrentado a grandes retos en los últimos meses. El descenso de la demanda de servicios de transporte y la bajada de las tarifas de flete han obligado a muchos empresarios a reducir sus flotas de vehículos, así como a abandonar el arrendamiento financiero. Por desgracia, no todos los arrendadores actúan con integridad, lo que puede acarrear importantes pérdidas económicas a los arrendatarios. En particular, se convierte en un problema la venta fraudulenta de un bien arrendado por debajo de su valor y el cobro al arrendatario de la diferencia de precio. En nuestro material, examinaremos los detalles de tales situaciones utilizando el ejemplo de la historia de un empresario que perdió por cooperar con un arrendador deshonesto. Aprenderá cuáles pueden ser las consecuencias de la rescisión anticipada de un contrato de arrendamiento y a qué debe prestar atención para evitar escollos similares. Le animamos a ver el vídeo que figura a continuación, en el que se presentan ésta y otras historias. En el vídeo aprenderá cómo protegerse contra las prácticas desleales y qué hacer cuando un arrendador intenta utilizar una situación de crisis en su beneficio.